Sabemos el alto de contagio al que estamos sometidos y
que de momento, la única defensa efectiva es la higiene. Cumplir las reglas sanitarias: (la mascarilla bien
puesta, la limpieza constante, y en la medida de lo posible, el aislamiento),
es fundamental.
¡Vamos! Que no nos sirvieron las enseñanzas que los
árabes, durante ocho siglos, nos intentaron inculcar, como para pretender
que en tres meses de confinamiento nos pongamos al día.
Creo que en lugar de quedarnos con la
retahíla: “de esta salimos aprendidos”, lo que tenemos que hacer es cambiar de
actitud y aprender de verdad.
Pero no me llamen pesimista, ni negativa, no…, nada de
eso…, también debemos reconocer que, en poco más de cuatro meses, gracias
a la pandemia, no solo hemos desempolvado palabras que no
usábamos, sino que hemos inventado palabros nuevos. No tardarán en
añadirlos a la RAE. Sirvan
de ejemplo:
Coviniño à dícese
de los niños nacidos durante la epidemia.
Covidiotas à dícese
de las personas irrespetuosas que se saltan las normas.
Covimoscascojoneras à son los anteriores que además se ríen de los que
las cumplen.
Corredor sanitario…
Corredor sanitario turístico… Etc.
Etc. Etc.
Y como oficios:
Están los rastreadores Civid19, y lo más
novedoso:
Rastreadores de coviguarros à dícese de los que buscan a estos últimos y los
ponen en orden.
¿No te los imaginas, paleta en ristre, corriendo tras
los gorrinos, obligándolos a recoger lo que tiran? En poco
tiempo, se reduciría la expansión del virus.
De seguro que las listas de desempleo descienden
rápidamente, porque se van a necesitar más que a los de técnicos de
la limpieza. Que ya decía mi abuela: «no sirve limpiar, lo que vale
es, no manchar»
Es solo una idea… ¿alguien tiene más?
#covidiotas#rastreadores#moscacojonera#corredorsanitario#turismo#rae#rafaelramosperiodista
No hay comentarios:
Publicar un comentario