Con las primeras luces, he vestido mis balcones
de Semana Santa. Se han llenado de alegría. Ya creían ellos que no
iban a lucir de nuevo sus galas. Saben que este año no van a escuchar los
tambores ni cornetas, y aunque de
momento están contentos, se preguntan si
de la misma manera que otros eventos han sido trasladados de fecha, también con esta celebración podría contemplarse esa posibilidad.
No tengo respuesta.
Las plantas
se han resentido con el nuevo look, porque no les llegará tanto el sol, pero les
compensa celebrar aunque sea en la
memoria y simbólicamente este gran acontecimiento.
Todos tiraremos de nuestros archivos para
inundar las redes con los recuerdos de años anteriores. Y de seguro que las
televisiones harán lo mismo. Así, que nos sentiremos afortunados por disponer
de esos momentos para el recuerdo.
Hoy, apertura del Mercaforum…y mañana la
entrada triunfal de Jesucristo en un pueblo que luego lo vilipendiaría.
…Semana Santa 2020
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