Si Rapunzel no se hubiera cortado las trenzas, habría hecho sombra a los girasoles que iluminaban las laderas del camino por donde tenía que llegar el infante. Sin su luz no habría podido traspasar el pasadizo oculto y no la hubiera salvado.
Era la
época, en la que sus altezas esperaban al caballero inefable, para que las
convirtiera en reinas del hogar.
Las princesas contemporáneas no esperan al príncipe, salen al campo de mirasoles y eligen el que más les gusta. Si acaso se han equivocado, lo retornan al origen sin ningún recato. Sin duda es, ¡una lección bien aprendida!
https://cincopalabras.com/2020/09/06/escribe-tu-relato-del-mes-de-septiembre-ii-laura-ripoll-modelo-y-cooperante/#comment-7228
No hay comentarios:
Publicar un comentario