Llama a la puerta un dolor que no conoce mi nombre. No le he llamado, ni buscado, ni dado pie a su osadía de invadir mi intimidad.
—Soy Alzheimer
—se presenta y enraíza en mi cerebro como una delicada enredadera al tronco del
árbol.
Un sutil
monstruo que exige el cuidado y la paciencia de un experto al que no admite
falsas miradas, ni abrazos mentidos.
Una
memoria carnívora que no responde a la prevención ni a paliativo alguno. Que
daña y cura, que inquieta y calma, que devora, y nadie sabe cómo gestionar su marcha.
https://cincopalabras.com/2022/06/12/escribe-tu-relato-solidario-del-mes-de-junio-iii-maria-isabel-gey-perez-presidenta-de-fagal-fagalalzheimer/#comment-9499
No hay comentarios:
Publicar un comentario