Sin prisa, coloca el lábaro de terciopelo sobre la barandilla del balcón y espera con paciencia el paso de la hilera de comulgantes debidamente engalanados, aunque este año no todos van de blanco…,” por los pequeños detalles se pierden símbolos y tradiciones”: piensa con tristeza.
Minutos antes de que la
procesión llegue, el cierzo entabla una intestina lucha contra el bochorno para aliviar el calor que sufren los
niños. En esta lid, la caída del
estandarte es inevitable.
El estropicio del paso
procesional es autentico, menos mal que los chavales corren y no sufren heridas de consideración…, tan
listos ellos…
https://cincopalabras.com/2022/06/26/escribe-tu-relato-solidario-del-mes-de-junio-v-alvaro-reina-actor-de-doblaje-y-locutor-de-radio-alvaroreinaloc/#comment-9500
No hay comentarios:
Publicar un comentario