¡Qué bonita Estambul abrigada con su manto blanco! Un hecho inusual, sin embargo. Parece una panorámica obtenida de una película fantástica.
Santa Sofía parece más
majestuosa, si cabe, en blanco y negro. Da la sensación de que quisiera
transmitir lo regio de su abolengo. Una belleza que no ha perdido esplendor,
como lo hacen las monedas que pasan de mano en mano.
Cristiana, o musulmana, su espíritu religioso, sobrio y expresivo, seduce. Invita al recogimiento, muestra un camino, para encontrar la paz, fácil de seguir.
Otra cosa es, ya, cuando sales de su recinto y el bullicio de las calles, llenas de vendedores de frutas, o bisuterías, de aguadores, o meros cambistas, te distrae de ese mágico momento que este templo regala.
Estaba escribiendo esto,
cuando las imágenes de Jerusalén impactan tanto como las de Estambul. Son
preciosas, pero alarmantes por lo inéditas.
Tal vez este invierno
quiera enfriar un poco el caldeado ambiente entre Rusia y el resto del mundo y
se le ha ido de la mano. ¡Cualquiera sabe!
De momento aquí llegan
gritos de guerra, pero no una Filomena.
#Estambul#santasofia#nevada#jerusalen#filomena#cambioclimatico#gritosdeguerra#rusiacontraelmundo#
Fotos: mi archivo y Google
No hay comentarios:
Publicar un comentario